
«Marilyn Monroe fue una aprendiz de delincuente tonta, superficial y sin talento»
James Ellroy (Los Ángeles, 76 años) se toma como un elogio que le llamen provocador. Sabe que gracias a sus 'boutades' vende mejor las novelas que le han convertido en indiscutible rey del 'noir estadounidense'. Publica ahora en español 'los seductores' (Random House). Es una trepidante, sucia y muy negra investigación criminal en torno a la muerte de Marilyn Monroe en Los Ángeles de 1962.
Ellroy detesta al potente mito erótico que aún seduce a las nuevas generaciones. Una bomba sexual que no cuenta con el aprecio ni la empatía del narrador, que trata como un trapo a la oxígena estrella de Hollywood a quien define como «una aprendiz de delincuente».
«Marilyn era un personaje de baja categoría, tonta, superficial y sin talento ninguno», agrega sin ambages. «Usaba a la gente, los dejaba tirados. Además de falsa era una drogadicta y un alcohólica», remacha justificando la retahíla de lindezas «en mi instinto» ¿Por qué protagoniza esta historia alguien quien detesta. «No es la protagonista, nunca tiene diálogo. No se le oye. Es una presencia», acota.