
Montero y Díaz tiran del freno para evitar el choque de trenes con la tributación del SMI
El movimiento de Montero llega a apenas tres días de que concluya el plazo del que dispone el Gobierno para ejercer su potestad constitucional de vetar las iniciativas de los grupos parlamentarios que supongan un aumento de los créditos o una minoración de los ingresos presupuestarios.
Una facultad que la ministra se había declarado dispuesta a ejercer contra tres proposiciones de ley presentadas en el Congreso por Podemos, el PP y por sus socios de coalición para tratar de doblarle el pulso y evitar que, por primera vez, tras varias subidas que lo han elevado en un 61% desde 2018, el SMI deje de estar exento del impuesto sobre la renta.
La situación se presentaba peliaguda tanto para el PSOE como para Sumar. Esta formación también había asegurado que no dudaría en hacer pinza con el primer partido de la oposición en la Mesa de la Cámara baja para, a su vez, levantar el veto del Gobierno (del que forma parte) y los socialistas ya amenazaban, a su vez, con llevar el asunto al Tribunal Constitucional. Hasta esta semana ninguno de los dos daba su brazo a torcer. Pero este lunes por la noche, Díaz, desveló en TVE que finalmente había elevado una propuesta a la ministra de Hacienda para tratar de llegar aun acuerdo.