El Atlético juega con fuego ante el Almería
Lo que se suponía que iba a ser un partido plácido en el Metropolitano estuvo cerca de ser un disgusto. Enfrente estaba el colista que había sumado sólo cuatro puntos en lo que va de campeonato. Además, el Atlético se puso 2-0 a los 20 minutos en su estadio inexpugnable, pero todo se fue torciendo hasta el punto de terminar pidiendo la hora y con el Almería mereciendo, como mínimo, el empate.
La diferencia fue sólo una en esta ocasión, la lamentable desconexión por parte de los futbolistas, que se vieron ya con el partido ganado, sin haber aprendido aún que, sin intensidad, hoy en día no se gana a nadie, y menos a un equipo de Primera División, por muy flojo que sea.
Valencia o Las Palmas son derrotas que no han debido calar muy hondo en unos jugadores que siguen cometiendo los mismos errores cuando creen que van a ganar andando. Simeone se desgañitaba en la banda con más ímpetu del que se veía sobre el césped, dejando claro que, de haber podido, hubiera cambiado a los diez jugadores de campo allá por el minuto 60.