Una anciana utilizó un ámbar de un millón de euros como soporte de puerta en su casa de Rumanía
La utilizó durante años como un simple tope de una puerta de su casa sin saber que esa piedra gigante era una pepita de ámbar valorada en más de un millón de euros. La dueña del 'tesoro' era una anciana rumana de la aldea de Colti, a unos 150 kilómetros al norte de Bucarest, que hace años encontró la piedra junto al río y decidió llevársela a su casa como soporte de una puerta.
La pobre señora murió en 1991, dos años después de la caída del régimen de Ceaușescu, y nunca llegó a saber que la pieza, de casi 3,5 kilos de peso, era en realidad una valiosa joya. Años después, la roca llamó la atención de un familiar de la anciana que heredó el objeto y lo vendió al Estado, que lo clasificó como tesoro nacional.
Actualmente lo exhibe en la colección del museo provincial del ámbar de Buzau, una ciudad-condado del sureste de Rumanía, conocido por los yacimientos de esta piedra semipreciosa, especialmente por el ámbar negro, el más valioso de todos los tipos de esta resina fósil.