
Sofía Vergara: «Los productos españoles de cosmética son los mejores»
Ese Madrid está conjurado contra Pedro Sánchez. Lo odian, lo insultan, lo aborrecen.
Y se ponen de acuerdo todos esos buenos españoles: la judicatura, obispos de la Conferencia Episcopal, fuerzas de seguridad del Estado, La Sexta y El País en vergonzosa coyunda, los presidentes autonómicos del PP, un Núñez Feijóo incapaz de mandarle a su casa al presidente de Valencia por su desastre, un Feijóo sin criterio en relación con la OTAN y los aranceles, ni lo que está ocurriendo humanitariamente en Gaza.
Un PP que quiere llegar como sea al poder -como sea- y utiliza todos los medios, siendo el PNV un estorbo a eliminar o a recordar que su voto fue decisivo para mandar a Rajoy a casa, que tampoco quiso irse de La Moncloa, igual que Sánchez. ¿O lo han olvidado?
La diferencia con 2018 es que el juez sentenció que el PP era, todo él, un partido corrupto y el testimonio de Rajoy ante el juez no había sido creíble. Les condenó. Y el PNV apoyó la moción de censura.