7Foto1Video© larazon.esLa IA imagina la voz de Federico García Lorca
Salvador Illa, presidente de la Generalitat, anunció ayer un plan estratégico para el despliegue de la inteligencia artificial (IA) en Catalunya, dotado con mil millones de euros hasta el 2030. Dicho plan, divulgado en el marco de las jornadas Catalunya intel·ligent, IA per transformar el futur, organizadas por La Vanguardia y la Generalitat, aspira a beneficiar a unas 5.000 pymes, así como a 90.000 ciudadanos, y es un reflejo de la omnipresencia y la proyección de esta nueva herramienta.
La IA es actualmente un fenómeno en plena efervescencia, tanto aquí como en el resto del mundo. Y en particular en Estados Unidos, donde los gigantes de la industria tecnológica (OpenAI, Microsoft, Nvidia, CoreWeave, AMD, Oracle…) compiten y a la vez colaboran, convencidos de que, además de revolucionar las vidas de la inmensa mayoría de los habitantes del planeta, la IA supone para ellos una oportunidad de negocio de extraordinarias dimensiones, ante la que se afanan por consolidar sus posiciones.
Es tan cierto que la IA dispone de un enorme potencial positivo, dada su capacidad para automatizar tareas y procesar grandes cantidades de datos en sectores tan dispares como la ciencia, la industria o el comercio, como que puede acarrear grave afectación sobre el mercado laboral, puesto que es capaz de realizar labores hasta ahora reservadas a seres humanos, abaratando costes, y por tanto puede conllevar la destrucción de no pocos puestos de trabajo.