
El Fiat 130 Familiare de «L'Avvocato»
Posee la cuarta parte de las empresas que cotizan en la Bolsa de Milán, el 4,4% del PIB de Italia depende de su gestión; espectaculares veleros, doce residencias, exquisitamente decoradas, entre ellas Villar Perosa, con cincuenta habitaciones y unos jardines legendarios, en las que recibe a amigos con apellidos como Kennedy, Capote o Kissinger; un museo privado con obras de Picasso, Monet o Renoir; es dueño de un club de fútbol, la Juventus …
Él y su esposa la aristócrata Marella Caracciolo di Castagneto, son la pareja «que todos copian, incluido yo», en palabras del modisto Valentino. Es L'Avvocato, es Gianni Agnelli, es la FIAT, es Italia…
Un personaje extraordinario que amaba, por supuesto, los automóviles. Se le podía ver al volate de un Panda o de un Ferrari pero, eso sí, siempre con detalles o variaciones específicas, con un «toque especial»: se cambiaban el motor, los interiores o se modificaba la carrocería para adaptarlos a sus gustos, como es el caso del protagonista de esta historia, del Fiat 130 Familiare que utilizaba en sus jornadas de esquí en Saint Moritz.