
Sin noticias del partido de Elon Musk
El acercamiento a la política se repitió en 1999 y 2011, fecha esta última en la que incluso apareció su nombre en una solicitud presentada en Texas para registrar un partido llamado Make America Great Again. Para cuando en 2015 se convirtió en candidato, nadie se lo tomaba en serio, pero sus devaneos recurrentes habían sido una clara señal de su ambición política.
La misma que mostró el fundador de Tesla y propietario de X, Elon Musk, cuando decidió apoyarle en las elecciones de 2024 con 200 millones de dólares y sus conocimientos informáticos, hasta acabar instalándose con él en la Casa Blanca. Aquello no funcionó. Eran demasiados gallos para un mismo corral, con dos magnates acostumbrados a que se haga su voluntad. Por eso, después de un rifirrafe muy público, ventilado en las redes sociales, el hombre más rico del mundo rompió con el Gobierno de Trump y decidió formar su propio partido.
«El Día de la Independencia es el momento perfecto para preguntar si queréis la independencia del sistema bipartidista (algunos dirían que unipartidista)», lanzó el pasado 4 de julio a sus 200 millones de seguidores en X. «¿Debemos crear el Partido de América?», preguntó. Como la respuesta afirmativa obtuvo el respaldo del 65,4%, «¡si lo queréis, lo tendréis!», concedió.