
Los servicios de inteligencia siguen sin pistas de un ciberataque aunque insisten en no descartarlo todavía
Absoluta cautela. «Todas las hipótesis abiertas», pero, casi 24 horas después de que la Península Ibérica sufriera el histórico apagón, ninguna de las agencias de inteligencia nacionales ni de los servicios de lucha contra los ciberataques tienen pistas que apunten a que el 'black out' del lunes pueda ser fruto de un sabotaje a través de internet o de manera física. Tampoco ninguno de los grupos de hackers habituales que han tenido a España en su punto de mira desde que comenzó la guerra de Rusia con Ucrania en febrero de 2022 ha reivindicado un ciberataque.
Según han confirmado diversas fuentes de la seguridad nacional ni el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ni el Centro Criptológico Nacional (CCN, el corazón tecnológico del CNI) ni el Instituto Nacional de Ciberseguridad ( INCIBE) ni el Mando Conjunto del Ciberespacio, que depende de Defensa, han encontrado, al menos por el momento, «indicios» de que una «intervención exterior» sea la causante la misteriosa y súbita desaparición de 15 megavatios durante cinco segundo a las 12.33 horas del lunes, que fue la que, en última instancia, causó la desconexión de la red ibérica del resto del conglomerado europeo.
Durante las dos reuniones del Consejo de Seguridad Nacional (CSN) que tuvieron lugar el lunes –según avanzaron fuentes cercanas a estos encuentros a este periódico- ninguno de los responsables presentes tampoco aportó datos que apunten a un ciberataque.