Los países menos dependientes del comercio con EE UU sobrevivirán a la guerra comercial
Por tanto, esta política arancelaria que pretende salvar a la economía local, puede desgastarla. Así lo ha calculado el Banco de España, que en un reciente informe detalla que un hipotético aumento generalizado de los aranceles «previsiblemente presionaría a la baja la actividad económica mundial y al alza la inflación».
Dichos impactos dependerán, entre otros factores inciertos, de las potenciales represalias comerciales que adopten los países afectados, de los posibles efectos de desviación de comercio y del eventual deterioro que se produzca en la confianza de los agentes, apuntan desde el organismo. Pero prevén que estos efectos adversos en la economía sean más importantes en EE UU que en Europa.
El supervisor hace varias simulaciones. Ante la posibilidad de que EE UU aplique un arancel del 10% para todas las importaciones, el impacto directo sería la depreciación del euro en favor del dólar y unos tipos de interés comparativamente más altos en EE UU.