
Israel endurece los ataques sobre Gaza y convierte el reparto de ayuda en cementerios
Son ya más de 400 los gazatíes muertos en los puntos de reparto de ayuda de la Gaza Humanitarian Foundation (GHF), según la cifra de la ONU. Las Fuerzas de Defensa admitían hasta ahora haber efectuado «disparos de advertencia», pero uno de los soldados entrevistados por el medio israelí reveló que «es una zona de muerte. Donde estuve destinado, entre una y cinco personas morían a diario. Los tratan como una fuerza hostil: sin medidas de control de multitudes, sin gases lacrimógenos, solo el disparo de balas con todo lo imaginable, ametralladoras pesadas, lanzagranadas o morteros».
La GHF es el organismo impulsado por Israel y Estados Unidos para reemplazar a las agencias de Naciones Unidas y está gestionado por mercenarios. Sus puntos de reparto están situados al sur de Gaza, en zonas con fuerte presencia militar, y la ONU los califica de «trampas mortales» para unos civiles desesperados por el hambre que provoca el bloqueo total impuesto por el Estado judío. Los soldados entrevistados, que sirvieron en estos centros, aseguraron que disparan contra quienes llegan antes del horario de apertura.
«Abrimos fuego temprano por la mañana si alguien intenta colarse a cientos de metros de distancia, y a veces simplemente cargamos contra ellos a corta distancia. Pero no hay peligro para las fuerzas», describió un soldado. «Sabes que no está bien. Sientes que no está bien, que los comandantes aquí se están tomando la justicia por su mano. Pero Gaza es un universo paralelo», añadió un compañero.