
Golpe policial a la explotación sexual de mujeres y el cultivo de marihuana en Tarragona
La investigación ha recibido el apoyo de la Agregaduría de la Embajada de Rumanía en España, Europolo y Policía Nacional de Rumanía.
El grupo criminal estaba compuesto por un clan familiar de origen rumano, que presuntamente se dedicaba a captar y trasladar hasta España a mujeres de su misma nacionalidad bajo la promesa de un trabajo legal. Una de las implicadas aprovechaba su condición de mujer para no levantar sospechas en las víctimas durante su captación, a las que engañaba diciendo que iban a trabajar en el sector de la limpieza o de la hostelería.
Los investigadores pudieron detectar que los implicados entraban en territorio nacional desde Rumanía hasta Barcelona vía aérea para, una vez allí, trasladarlas en coche hasta Tarragona, donde eran obligadas a ejercer la prostitución en la vía pública o en establecimientos de alterne. Además se exigía a las mujeres que contrajeran matrimonio con miembros del grupo para que su actividad delictiva no fuera detectada durante los viajes.