
Exigua distensión comercial
Durante meses hemos tenido que escuchar que la política de Estados Unidos es proteccionista y que el presidente Donald Trump no quiere negociar, sino volver al mercantilismo de los años 30. Pues bien, se vuelve a demostrar que los aranceles se utilizan para conseguir mejores relaciones comerciales para todos igual que se utilizan las armas nucleares para evitar una guerra nuclear. Adicionalmente, más de 90 países están negociando con la Administración estadounidense.
En España, Sánchez y sus socios se dedican a lo de siempre: a hacer propaganda y anunciar ayudas millonarias que jamás entregan. En la misma semana en la que nos enteramos de que no ha dado ni un 20% de las ayudas de la DANA, presenta en el Parlamento un ridículo paquete antiaranceles que no elimina ni una de las trabas internas al comercio y encima solo da facilidades a las empresas para endeudarse y acudir a comités absurdos con el ministro Cuerpo. La realidad, como hemos mostrado en esta columna, es que los mayores aranceles a nuestras empresas los pone el Gobierno.
El índice manufacturero de España lleva en contracción tres meses consecutivos, hasta abril de 2025. Y el desplome en los datos es alarmante. La última lectura disponible, correspondiente a abril de 2025, fue de 48,1 puntos, indica una recesión severa del sector manufacturero. La peor caída en nuevos pedidos desde 2023 y la mayor caída en compras desde 2024.