
El miedo a represalias desluce el primer aniversario de la muerte de Navalni
Los simpatizantes del fallecido opositor ruso Alexei Navalni han depositado este domingo flores en la tumba del activista en Moscú, un año después de su fallecimiento en prisión, donde cumplía condena por "extremismo y fraude" tras un proceso que el propio opositor denunció como la culminación de una larga persecución política orquestada por el presidente de Rusia, Vladimir Putin.
La policía había permitido la entrada al cementerio de Borisovskoye pero grabó todos los procedimientos entre avisos de organizaciones contrarias al Kremlin sobre la posibilidad de arrestos durante el evento porque la fundación anticorrupción de Navalni está clasificada como "extremista" y prohibida en Rusia.
Entre los visitantes de la tumba aparecieron diplomáticos extranjeros, como la embajadora estadounidense, Lynne Tracy, y el embajador de la UE, Roland Galharague.