El clavo ardiendo del Bayern contra un Real Madrid incandescente
Corren vientos de cambio para un Bayern que ha perdido su hegemonía prácticamente incontestable en el campeonato germano a manos del Bayer Leverkusen de Xabi Alonso, claudicó de forma estrepitosa en la Supercopa frente al Leipzig y sufrió una bochornosa eliminación en la Pokal al sucumbir en segunda ronda ante el Saarbrücken, un modesto equipo de la región del Sarre que milita en la tercera división del fútbol teutón.
Acostumbrado a dominar con puño de hierro el 'fussball', esa concatenación de debacles ha convertido al club muniqués en un polvorín.
La crisis se ha cobrado ya su primera cabeza, Thomas Tuchel, quien hará las maletas cuando concluya la temporada y que viene de mantener un tenso desencuentro público con Uli Hoeness, presidente de honor y una de las vacas sagradas de un Bayern regido por un particular sanedrín con tanto peso como ausencia de pelos en la lengua.