El Barça ve el vaso medio lleno
En esta ocasión, Flick aprovechó la rueda de prensa para destacar los aspectos positivos que tuvieron los noventa minutos de infarto que se jugaron en Da Luz. «Ha sido un partido muy loco. Lo más positivo es la mentalidad. Hemos remontado y es maravilloso. Queríamos lograr algo diferente en la segunda mitad, volver al partido. La mentalidad del equipo ha sido increíble. Siempre han creído y han logrado un resultado fantástico», afirmó el germano tras el choque.
Esa mentalidad fue clave en un partido en el que al Barça no dejaron de aparecerle palos en la rueda. El equipo podría haberse caído tras el 1-0, el 3-1 y sobre todo el 4-2, pero supo sobreponerse y sacar a relucir un carácter que estaba enterrado en lo más profundo del ADN culé. Y es que el Barça se había acostumbrado en los últimos años a asimilar los golpes sin ningún tipo de rebeldía.
Así pasó en Roma, Liverpool, Turín, Múnich o Da Luz, pero no en esta ocasión. Los de Flick crecieron gracias a la batuta de un Pedri que vive el mejor momento de su carrera y con la inspiración de Raphinha, que este año no necesita cuajar un gran partido para ser determinante.