
Trump inaugura 'Caimán Alcatraz', la prisión de Florida para encerrar a miles de inmigrantes
Donald Trump convirtió la deportación de millones de personas en el eje central de su campaña electoral. Durante meses y meses habló de una "invasión masiva", de bandas criminales, ladrones, asesinos y violadores, alimentó el mito de que muchos países extranjeros vaciaban sus cárceles y sus centros psiquiátricos para mandar a todos los internos a Estados Unidos.
Una vez llegado al poder, mientras aplica las políticas más restrictivas para detener a decenas de miles de personas, cuestiona los derechos de los Estados y maniobra para destruir las llamadas 'ciudades santuario', ha mantenido la misma retórica. Pero acompañada además de un nivel de deshumanización, frivolidad y crueldad inéditos.
Al menos 10 inmigrantes han muerto bajo custodia de ICE, la agencia que organiza las redadas y que está deteniendo a personas por todo el país con agentes encapuchados, fuertemente armados y que a menudo no se identifican mientras meten por la fuerza a extranjeros en furgonetas. Al menos dos de las muertes fueron suicidios.