3Foto© lavanguardia.comSánchez acelera para recomponer la relación con Junts, que opta por la prudencia
La palabra resignación no aparece en el diccionario de Pedro Sánchez, dispuesto a “reiniciar el diálogo” con Junts para garantizar “la segunda parte de la legislatura”, según confían en la Moncloa. Su objetivo es recomponer los platos rotos con la formación de Carles Puigdemont, para poder reflotar la mayoría parlamentaria que, hace ya más de dos años, le invistió de nuevo como presidente del Gobierno.
“Asumo los incumplimientos y los retrasos que ha criticado Junts”, admitió Sánchez, hasta en tres ocasiones, durante la entrevista que ayer concedió a Jordi Basté en RAC1. Y después reunió al Consejo de Ministros, que pisó el acelerador para corregir algunas de estas demoras con la aprobación de un real decreto ley que incorpora tres compromisos pendientes con los posconvergentes.
El jefe del Ejecutivo acometió así un significativo giro en su discurso –hasta ahora centrado en defender sus cumplimientos– para tratar de revertir la ruptura de Junts que amenaza el curso de la legislatura. A continuación, el Ejecutivo aprobó el decreto ley –que la próxima semana deberá afrontar su convalidación en el Congreso– que devolverá a la Generalitat la gestión de la oferta pública de empleo y además permitirá que los ayuntamientos aprovechen su superávit para invertir, y que las pymes y autónomos aplacen hasta el 2027 su adaptación a la nueva facturación digital.