
Los Veintisiete aprueban el fin de las importaciones de gas ruso para finales de 2027
Las importaciones de gas ruso al bloque se han reducido en gran medida desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania, en febrero de 2022, hasta caer al 19% de la energía total que importa el bloque. El veto a esta fuente de energía proveniente de Rusia contaba con el rechazo de Hungría y Eslovaquia -países muy dependientes del gas ruso-, que finalmente han quedado en minoría (hacía falta una mayoría cualificada para que la iniciativa fuera aprobada).
En septiembre, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen propuso acelerar la desconexión europea de Moscú un año más y dejar de importar gas ruso a finales de 2026 para aumentar la presión sobre el presidente ruso, Vladímir Putin, para forzarle a sentarse en la mesa de negociación.
El calendario establecido para llevar a cabo este plan -que todavía no se ha votado- contempla la prohibición de nuevos contratos para la llegada de gas ruso desde enero de 2026 y la total desconexión a partir de 2027, cuando vencerán los acuerdos de largo plazo de suministro por gasoducto a países sin litoral.