© laverdad.esLa mitad de los médicos jóvenes sufren el síndrome del trabajador quemado
Agotamiento emocional,baja realización personal, insomnio, deterioro de vínculos emocionales… Estas son algunas de las consecuencias del «síndrome de desgaste profesional» o «burnout», un fenómeno vinculado a la exposición prolongada a estrés crónico en el ambiente de trabajo. En España, esto es algo muy común en la profesión médica, y así lo denuncian desde la Organización Médica Colegial.
Hoy se publica un informe que aborda el caso particular de los médicos jóvenes en formación. La necesidad del mismo la explican desde el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos: desde la pandemia se viene experimentando una «alta prevalencia» de trastornos mentales y alteraciones de salud dentro del colectivo.
El periodo de la Formación Sanitaria Especializada (FSE) supone guardias y jornadas muy extensas, a la vez que las responsabilidades clínicas aumentan. Por ello, desde el Consejo General de la agrupación de colegiados se ha diseñado un estudio denominado «Ikerburn», que busca «visibilizar y cuantificar el grado de burnout sobre la población de médicos jóvenes a través de cifras reales».