La Fiscalía exime a los mandos de Cerro Muriano y señala al capitán por la muerte de los soldados
“El capitán Zúñiga”, recuerda el fiscal en su recurso, “ha manifestado que adoptó las medidas de seguridad que, a su juicio, consideró necesarias y suficientes para la correcta realización de la actividad sin poner en riesgo la integridad física de su personal”.
Lo cierto es que el capitán ordenó cruzar el pantano, cuyas aguas estaban extremadamente frías, por su parte central, donde había más de tres metros de profundidad. La cuerda tendida de orilla a orilla como guía se hundió cuando los militares se agarraron a ella para no ahogarse y las mochilas, que debían servir de flotadores, carecían de estanqueidad y no flotaban.
Algunas iban sobrecargadas con una mina simulada de 3,5 kilos. Además de los dos fallecidos, otros soldados sufrieron lipotimias y uno tuvo que ser hospitalizado.