
La corrupción lleva a Díaz a confrontar cara a cara por primera vez este miércoles con Sánchez
Díaz cogerá las riendas de la portavocía en la primera intervención de Sumar tras la intervención inicial de Sánchez. Algo inédito para un miembro del Ejecutivo –siempre se suele reservar al portavoz oficial, actualmente Verónica M. Barbero, y a los adjuntos– que solo tiene como precedente la sesión de investidura del dirigente socialista en noviembre de 2023.
De las balas de fogueo al fuego amigo, esta vez, el tono de la líder gallega será mucho más grave que entonces.
Pese a que en las últimas semanas ha manifestado su «profundo malestar» por la respuesta del PSOEa los supuestos casos de corrupción que atenazan al partido –la última de ellas, la semana pasada, cuando mostró su enfado durante la cumbre de la ONU en Sevilla–, Díaz siempre ha manifestado una posición de total lealtad hacia el socio mayoritario en sus intervenciones que se producen dentro del hemiciclo.Reservando las críticas más duras a otros diputados de su bancada, como la propia Barbero o el portavoz de IU, Enrique Santiago.