
El PSOE arremete contra Carlos Mazón y pone en duda sus estudios tras la dimisión de Noelia Núñez
En el PP tenían ayer claro que no había más salida que la que finalmente escogió Núñez para no perder el relato y mantener íntegra su imagen frente a un PSOE en descomposición. «Yo no soy Pedro Sánchez», afirmó Feijóo, muy consciente de que no podía permitirse una doble vara de medir y menos tras el estallido del 'caso Montoro', que los socialistas están intentando explotar al máximo para desviar el foco de su tejado. En la dirección nacional insisten en que les separa un «océano moral» de sus rivales y que, por más intenten meterles en el mismo saco no son como ellos. «Ni de lejos», recalcan.
Los populares se parapetan en la «ejemplaridad» dada por su ya exvicesecretaria y en su «autoexigencia» como partido para meter el dedo en la llaga del PSOE y pedir la renuncia de todos aquellos cargos que se han visto salpicados por escándalos similares al que le ha costado la dimisión a Noelia Núñez, sin que hayan seguido el mismo camino que ella.
Es el caso de la delegada del Gobierno en Valencia, Pilar Bernabé, que no acabó la carrera ni se licenció en Filología y Comunicación Audiovisual como aparecía en un principio en la web del PSOE y que Ferraz tuvo que modificar; del ministro de Transportes, Óscar Puente, por su máster en Dirección Política en un centro vinculado a su partido o del portavoz parlamentario Patxi López, que inició la carrera de Ingeniería pero que «no pasó de primero».