
Cambios bruscos de luz, polvo y más vegetación e insectos: La «tormenta perfecta» al viajar en carretera
Las vacaciones de Semana Santa son el momento del año con una mayor concentración de desplazamientos por carretera en España. En 2024 se produjeron 15.458.430 movimientos de largo recorrido, más que en el conjunto de las operaciones salida (del 30 de julio hasta la medianoche del 1 de agosto) y retorno (del 30 de agosto hasta la medianoche del 1 de septiembre) de las vacaciones de verano, que sumaron, entre ambas, 9,76 millones de desplazamientos.
Además del gran número de usuarios en las carreteras, hay una serie de factores ambientales que dificultan especialmente la conducción y la visibilidad a mediados de abril, durante las vacaciones de Semana Santa. Por un lado, la meteorología cambiante, con lluvias y grandes variaciones de temperaturas.
El sol comienza a incidir con más fuerza, con amaneceres y atardeceres que dificultan más la visión. Es una época en la que la vida despierta de su letargo invernal. No solo hay un mayor movimiento de animales e insectos, sino también de crecimiento de plantas que invaden la carretera. Por último, también aumentan el polen y el polvo en suspensión en el aire.