
BMW prevé un impacto de 1.000 millones por los aranceles de EEUU y las tasas a China
La compañía BMW prevé mantener su rentabilidad automovilística por encima del 8% hasta 2030 y con el compromiso de «aumentar ligeramente el volumen de ventas».
BMW se enfrenta a otro año difícil, ya que lidia con la disminución de las ventas en China, donde los productores locales de vehículos eléctricos liderados por BYD están tomando el relevo. La incertidumbre marcada por la política de aranceles de Donald Trump en estados Unidos y las tasas de la Unión europea a los vehículos producidos en Estados Unidos son dos de los factores que pueden lastrar sus resultados para el ejercicio del año que acaba de comenzar. Por eso calculan que ambos factores lee supongan un coste de unos 1.000 millones.
BMW cerró 2024 con un beneficio neto atribuido a sus accionistas de 7.290 millones de euros, lo que supone un descenso del 35,4% respecto al logrado un año antes, en un contexto marcado por la menor demanda de vehículos en el mercado chino y la escalada de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y Europa, según los datos publicados por la empresa. Durante el año completo, el Grupo BMW entregó 2,45 millones de vehículos BMW, MINI y Rolls-Royce a clientes de todo el mundo. Esto representa una ligera disminución del 4 % con respecto al año anterior.