Un empate técnico entre los candidatos aboca a Irán a una segunda vuelta de las presidenciales
Irán tendrá que celebrar una segunda vuelta en sus elecciones presidenciales tras el empate técnico producido este viernes entre los dos favoritos a dirgir el país. La segunda votación tendrá lugar el viernes, 5 de julio, y se presentarán el considerado moderado Masud Pezeshkian y el radical y ultraconservador Saeed Jalilí.
Pezeshkian ha sido el ganador este viernes, con más de 10 millones de votos, mientras que Jalilí se ha quedado con nueve. Sin embargo, el favorito es Jalilí: el tercero en discordia en los comicios, el también ultraconservador Mohammad Bagher Ghalibaf, ha cosechado más de tres millones de votos, y se espera que la mayoría de estos sufragios vayan hacia Jalilí.
Hay más: durante la campaña electoral, el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jameneí, ha mostrado su apoyo -velado, eso sí- a Jalilí, asesor directo del líder supremo, y ha criticado sin nombrarlo a Pezeshkian. Este moderado, parlamentario desconocido en Irán hasta hace unas semanas, aboga por crear una República Islámica más amable, pero por supuesto apuesta por continuar con el sistema establecido.