Los socialistas franceses se desmarcan del bloque de izquierda y no votan la moción de censusa contra Bayrou
El veterano dirigente centrista, nombrado por el presidente Emmanuel Macron el 13 de diciembre tras la censura de su predecesor Michel Barnier, se enfrentó a la primera moción de su mandato. El texto había sido presentado el martes en respuesta a la decisión de Bayrou de no someterse ese día a un voto de investidura. A diferencia de España, en Francia no es obligatorio.
El primer ministro lo evitó porque su Gobierno solo cuenta con el apoyo de los partidos afines a Macron y la derecha tradicional de Los Republicanos (LR), que apenas suman 212 escaños (de un total de 577). De la misma manera que no hay una mayoría absoluta a favor de Bayrou, tampoco la hay para censurarlo.
La moción de este jueves solo obtuvo el apoyo de 131 diputados, lejos de los 288 votos —en estos momentos un escaño está vacío debido a una dimisión— del umbral de la mayoría absoluta. Aunque Bayrou haya superado con comodidad este examen parlamentario, esto no significa que le espere un mandato plácido.