Las urgencias del Girona pasan por Austria
En su primera campaña pugnando batallas europeas, el Girona tiene mucho trabajo por hacer para prolongar el sueño en el Viejo Continente, y los de Míchel ya cuentan como finales cualquier envite de los que se les presenta de aquí al final de la liguilla. Si bien ni el aficionado más optimista de la comarca del Ampurdán imaginó hace bien poco a los suyos viajando por territorio Champions, lo cierto es que ahora hace falta un gran ejercicio de fe para pasar a la siguiente ronda.
El equipo de Míchel se encuentra de dulce, en el mejor momento de la temporada, y anda enderezando el rumbo tras un inicio titubeante en LaLiga y algo de mala suerte en la máxima competición continental.
Tras sumar un total de tres victorias consecutivas en el torneo doméstico, los rojiblancos, que recuerdan por momentos a aquel equipo mágico que enamoró durante el curso pasado, buscarán en Austria frente al Sturm Graz su segundo triunfo en la Liga de Campeones tras vencer al Slovan Bratislava en casa y caer ante PSG, Feyenoord y PSV Eindhoven, algo que sería un gran impulso para el proyecto catalán.