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La fiebre por el caldo de huesos: ¿funciona el último superalimento de moda?
El secreto de su fama –es un alimento básico en dietas como la 'keto' o la 'paleo', tan populares como polémicas– se encuentra básicamente en la cantidad de colágeno y aminoácidos que contiene el líquido resultante de la cocción de los huesos, muy superior al de otros consomés. Que este caldo triunfa es un hecho que no se puede negar.
Basta con ver la cantidad de tutoriales publicados en plataformas como TikTok o Instagram sobre cómo preparar este 'milagro líquido' para hacerse una idea del fenómeno desatado por este plato tradicional, tema recurrente en las conversaciones de los gimnasios y del que se comercializan hasta suplementos... para mascotas.
La duda, como suele ocurrir cada vez que se pone de moda un nuevo 'superalimento', es si realmente es tan bueno como se dice y merece todo el bombo y platillo con el que se publicita. En general, los endocrinólogos y nutricionistas coinciden en que «no existen evidencias científicas» que avalen estos supuestos beneficios más allá de las propiedades antiinflamatorias que se le atribuyen a los caldos en general. «Digamos que entra en la categoría de alimentos que no hacen daño, pero que en algunos casos puntuales pueden ayudar a mejorar la salud intestinal», argumentan los expertos consultados.