
La emoción toma el Bernabéu en el final de una era
El Santiago Bernabéu no solo despidió ayer una temporada gris del Real Madrid, sino que también, simbólicamente, cerró una era dorada. Carlo Ancelotti, el entrenador con más títulos de la historia blanca, y Luka Modric, el futbolista que más trofeos ha conquistado con el equipo de Chamartín, se despedían de un estadio por el que han desfilado algunos de los técnicos y jugadores más grandes, pero ninguno más ganador que ellos.
En el coliseo del Paseo de la Castellana se solapaban dos últimos días ilustres. Ni Carletto se sentará más en el banquillo local ni Luka volverá a ejercer de capitán sobre el césped. Era una tarde de primavera para el recuerdo y la nostalgia, como denotaron los dos tifos desplegados al inicio. Uno en el fondo norte con la figura de Ancelotti y la inscripción 'Gracias Carletto'; otro en el fondo sur, que incluía una imagen de Modric y rezaba 'Gracias Leyenda'.
En el centro del campo, una camiseta con el '10', el dorsal que en los últimos años ha engrandecido todavía más el centrocampista croata. Y en la grada, puesta en pie para una ovación de época, innumerables pancartas, camisetas y bufandas con referencias a dos símbolos del madridismo, en el banquillo y sobre el césped, que decían adiós a la que ha sido su casa en tantas y tantas jornadas de fútbol.