© canarias7.esEl PSOE sufre nuevas bajas por las denuncias de acoso sexual y asume que la sangría continuará
En el PSOE asumen que la situación está descontrolada, se preparan para lo peor y esperan más convulsiones en las próximas jornadas. «Esto va a ser así durante algún tiempo, serán días de mucha intensidad, pero no pasa nada. Lo importante es que el partido tiene luces largas y va a actuar con tolerancia cero», trató de calmar las aguas la secretaria de Igualdad socialista, Pilar Bernabé, que se reunió por la tarde en Madrid con las responsables de Igualdad de todas las comunidades.
Pero la realidad es que las nuevas revelaciones sitúan al PSOE cada vez más a la defensiva. Ahora, Ferraz investiga una doble denuncia, por acoso sexual y laboral, presentada por una mujer, que se ha identificado con nombre y apellidos, contra el alcalde de Almussafes, Toni González, que también es el número dos del PSOE en Valencia, y el alcalde de Belalcázar (Córdoba), el socialista Francisco Luis Fernández Rodríguez, dejó ayer su puesto por mandar mensajes sexualmente explícitos («echas de menos una buena comida de almeja») a una subordinada.
La secretaria de Organización del partido, Rebeca Torró, que todavía no había dado ni una rueda de prensa desde que llegó al puesto en julio, intentó por la mañana contener la alarma que ya había saltado en todas las federaciones. Torró negó que su formación intentara «tapar o encubrir» las denuncias que han hecho explotar el MeToo socialista, los supuestos casos de acoso sexual de Paco Salazar, exasesor del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en La Moncloa, y aseguró que «el PSOE actuó de manera contundente en cuanto la noticia salió en los medios de comunicación».