
BYD se enfrenta a una competencia cada vez más feroz en China
Es difícil estar en la cima. Para BYD, el mayor fabricante de vehículos eléctricos del mundo, la competencia interna en su China natal está demostrándolo. Sus ventas en agosto llegan con apenas un crecimiento del 0,1% en comparación con 2024 –sigue siendo la primera marca del país, con 2,8 millones de entregas acumuladas en lo que va de año–.
Su principal rival, el Grupo Geely –matriz de marcas como Volvo, Polestar, Lotus o Smart– registró un crecimiento del 38% en agosto, mientras que otros fabricantes más jóvenes, como Nio o Leapmotor, presentan entregas de récord. En el caso de Xpeng, que acaba de desvelar su nuevo sedán, ya ha vendido más del triple de lo que registró en todo el ejercicio pasado.
El mercado en China lleva más de un año en una guerra de precios por parte de los fabricantes, algo que ha conseguido que aumente su volumen de ventas pero que ha hecho que sus resultados se resientan. Tanto así que, el pasado lunes, presentó una caída del 30% en su beneficio neto y esto, en consecuencia, hizo que se esfumasen unos 6.000 millones de capitalización bursátil.