
Así es la reforma de la ley de extranjería que se vota en el Congreso
El pasado fin de semana fuimos testigos de una nueva muestra de cómo la política española parece funcionar más por impulsos estratégicos que por convicciones ... reales. Médicos de toda España se manifestaron en Madrid contra la reforma del Estatuto Marco, denunciando condiciones laborales que rozan la esclavitud. «Somos médicos, no esclavos», gritaron, exigiendo respeto y dignidad.
Lo llamativo es ver cómo algunos partidos corren a ponerse detrás de las pancartas cuando conviene. El Partido Popular, por ejemplo, mostró su apoyo a la protesta, afirmando que el Estatuto necesita actualizarse, pero «no así». Curioso, porque en muchas comunidades donde gobiernan, las condiciones sanitarias también dejan mucho que desear.
Por si fuera poco, desde Sevilla, María Jesús Montero, del PSOE, prometió devolver a la sanidad al lugar que merece si su partido recupera la Junta de Andalucía. ¿Y qué ha impedido hacerlo antes, cuando han gobernado durante décadas?