
Montero acusa al PP de buscar excusas para desmarcarse del acuerdo arancelario
A pesar de que en la víspera el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, había dado por encauzadas las relaciones tras una conversación con el vicesecretario popular de economía, Juan Bravo, en la que le aseguró que, en contra de lo que sostiene la formación independentista, no se ha pactado con Junts territorialización alguna de los fondos, varios dirigentes populares han insistido en sus preguntas a la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, en hablar de un «cupo arancelario» catalán.
«¿Era esta su respuesta de Estado a un asunto que tiene en vilo a todos los españoles?», ha recriminado la número dos del primer partido de la oposición, Cuca Gamarra. «Lo que se necesita es, en primer lugar, unidad desde Europa. Nadie puede ir por libre. Y, en segundo lugar, igualdad entre todas las empresas, tengan donde tengan su CIF, y criterios objetivos acordes con las necesidades. Pero cuando ustedes tienen que elegir entre España y sus socios, siempre eligen a los segundos, a sus socios. Si lo vuelven a hacer -ha remachado-, no contarán con nosotros».
Esa última advertencia de Gamarra es la prueba de que los puentes no están rotos pero la desconfianza entre el PSOE y el PP y, sobre todo, la convicción de ambos de que a la postre acabarán sucumbiendo a las presiones de sus aliados políticos -las fuerzas nacionalistas, independentistas y de la izquierda, en un lado, y Vox en el otro- hace difícil dar por hecho que la tregua de Estado vaya a ser posible.