'Grotesquerie', lo nuevo de Ryan Murphy: un noir pasado por vodka
Los hábitos son tendencia en la ficción a la hora de crear personajes memorables que se mueven en el terreno de la intriga, el fantástico y el terror.
A la hermana Andrea, cazadora de demonios excéntricos en la más que recomendable 'Evil', cuya cuarta y última temporada ya está disponible (MoviStar +), se une otra monja entrañable, la hermana Megan Duval, co-protagonista de 'Grotesquerie', una propuesta ya completa en Disney + que comienza con una fuerza inusitada que va perdiendo capítulo a capítulo.
Si la extraordinaria 'Seven', un retorcido thriller que hizo historia en el noveno arte, lo hubiera dirigido el ínclito John Waters, el resultado podría acercarse sobremanera a este proyecto de diez episodios que pega un giro excesivamente brusco, no del todo comprensible, en su ecuador.