El voto del extranjero no altera el reparto de escaños en el Parlamento Vasco, a la espera de Gipuzkoa
En función de los resultados provisionales contabilizados la noche del 21-A, la menor diferencia de votos en el último escaño de cada territorio se daba en Bizkaia, donde el acta número 25 estaba en manos socialistas y el siguiente partido, Sumar, necesitaba 738 votos más para arrebatárselo. En todo caso, no solo cuenta el recuento aritmético, sino también el cociente que calcula la ley D'Hondt. En Gipuzkoa el último escaño también correspondía al PSE-EE y el siguiente grupo, EH Bildu, necesitaba 1.360 votos más para lograrlo. En Álava la partida se jugaba entre EH Bildu y el PNV.
La importancia radicaba en que cualquier cambio podría provocar un terremoto político. En el caso de que el PSE-EE hubiera cedido los dos escaños que tenía en juego, el PNV y los socialistas hubieran perdido la mayoría absoluta de la que disponen. Y si EH Bildu hubiera sacado el de Gipuzkoa habría roto el empate con los jeltzales y hubiese obtenido un triunfo histórico y el 'sorpasso'. Además, no solo se recontaba el voto CERA, sino también los recursos sobre posibles irregularidades en algunas mesas. Pero al final todo queda como estaba, aunque con algunos matices.
El recuento de Bizkaia otorga la mayoría del voto CERA al PNV, que ha logrado 1.017. Por detrás, EH Bildu ha conseguido 604, el PSE-EE 531, PP 511, Vox 168, Sumar 100, y Podemos 87. En Álava, el PNV ha recabado 173, EH Bildu 160, PSE-EE 143, PP 129, Elkarrekin Podemos 37, Vox 33 y Sumar 27. Es decir, los jeltzales se convierten en la primera fuerza en Álava en el voto CERA, mientras que en el recuento global gana EH Bildu. En Gipuzkoa, por su parte, ha vencido EH Bildu con 986 votos, seguido por el PNV, 672, el PSE, 419 y el PP, 347.