© ideal.esEl genio imparable de María Dueñas deslumbra y asombra
Impresiona su facilidad para extraer una galaxia de sonidos de su violín Nicolò Gagliano de 1714, una joya que alterna con un Stradivarius Camposelice de 1710. Fascina la mezcla de aplomo y emoción con la que Dueñas aborda 'fortes', 'pianos' o 'glissandi'. Pasma su soltura y su frescura en una interpretación prodigiosa que combina madurez, audacia y una expresividad fuera de lo común.
Con solo 22 años, Dueñas se ha ganado un lugar de privilegio en el mundo de la música, reservado a muy pocos elegidos. Ha alcanzado la categoría de estrella internacional mucho antes que antecesoras como Anne-Sophie Mutter o Janine Jansen.
Tras su memorable actuación, una larguísima cola de admiradores aguardaban en busca de su autógrafo. Querían su firma en el programa del concierto que compartió con el director italiano Antonio Pappano y la Chamber Orchestra of Europe (COE), o en los álbumes de Deutsche Grammophon, sello con el que la joven violinista tiene un contrato de exclusiva.