
De mantero en Marbella a modelo tras sobrevivir en una patera
Este africano de 26 años llegó a Marbella de manera irregular. Comenzó de mantero en el paseo marítimo y un día un fotógrafo lo vio en la calle y lo captó para una sesión de fotos. Desde entonces ya ha sido imagen de marcas internacionales y ha desfilado en pasarelas de moda destacadas, sector en el que se está abriendo camino. «No ha sido fácil pero estoy feliz de lo que he conseguido y de poder estar ayudando a mi madre cada mes», ha comentado mientras aseguraba que en su familia son 17 hermanos.
«Trabajé duro para pagar los 600 euros que me costó el pasaje en la patera pero quería prosperar», relata Cheikh. El joven describe el viaje en el cayuco como «los días más duros, más fríos y más llenos de miedo de mi vida». Si bien el trayecto estaba previsto para cinco días, las dificultades del mar hicieron que la travesía se alargara hasta los diez. «Pensábamos que íbamos a morir. Estábamos perdidos en medio del océano sin comida y se nos agotaban las esperanzas de llegar a tierra firme fuera o no fuera España, porque ya lo único que queríamos era sobrevivir», asegura.
«Cuando vimos las luces de Tenerife nadie podía creerlo. Llorábamos, reíamos… era como si todo se borrara con la esperanza de una nueva vida», describe Cheikh. Esa euforia se tornó también en una profunda tristeza pues de las dos pateras que se embarcaron para España solo llegó una sin víctimas mortales. «Yo venía en un cayuco con 120 pasajeros y detrás otro más grande con 300 que se partió por la mitad», explica el africano quien recuerda con añoranza a los amigos que perdió pues «solo sobrevivieron ocho personas».