
Batacazo del Barça en el Pizjuán
El Barcelona cerró este domingo en el Ramón Sánchez Pizjuán su particular semana 'horribilis'. Tras caer en Champions ante el PSG, el conjunto que dirige Hansi Flick repitió derrota por 4-1 ante el Sevilla en un partido en el que los culés no estuvieron cómodos en ningún momento y en el que se vieron superados por la intensidad de los de Matías Almeyda. Los tantos de Alexis Sánchez, Isaac Romero, Carmona y Akor Adams castigaron a un Barça que se marcha al parón liguero por los partidos de selecciones con dos derrotas seguidas y muy malas sensaciones.
Y es que el partido ya comenzó siendo una prolongación de los últimos minutos contra el PSG. La zozobra de ese día se trasladó a un inicio de encuentro en el que el Sevilla fue más intenso en los duelos, en el que Pedri y De Jong eran incapaces de bajar el balón y tener el control del juego y en el que los de Almeyda estaban crecidos.
De poco sirvió que Flick saliera con toda la artillería que tenía disponible. Su equipo entró frío al encuentro y eso provocó que la atmósfera del Pizjuán, siempre efervescente, le pasara por encima.