© ideal.esLos bomberos aún encuentran cadáveres en las torres incendiadas de Hong Kong
«Algunos cuerpos han quedado reducidos a cenizas, por lo que quizá no seamos capaces de localizar a todos los desaparecidos», ha declarado la superintendenta policial Karen Tsang Shuk-yin, visiblemente emocionada, a los medios de comunicación congregados en el lugar de los hechos. Las fuerzas de seguridad, por otro lado, han detenido ya a un total de 13 personas vinculadas con las obras de renovación de la urbanización, un proyecto valorado en 330 millones de dólares hongkoneses (36 millones de euros) y en marcha desde julio del año pasado.
Entre los arrestados se cuentan tres directivos de la firma ejecutora, Prestige Construction and Engineering, acusados de homicidio imprudente por emplear materiales no homologados. Esta empresa ya había sido sancionada por prácticas ilícitas en otras obras del territorio y había recibido tres advertencias por violar el protocolo antiincendios en Wang Fuk, la última de ellas el pasado 20 de noviembre, apenas una semana antes del devastador fuego.
Las autoridades han confirmado este lunes que uno de los factores que contribuyó a la expansión de las llamas a una velocidad «inusual» fue la red exterior que cubría el andamiaje de bambú. Al menos siete de las veinte muestras tomadas no cumplían con los estándares en materia de retardación de llamas. Los hallazgos preliminares indican que la empresa habría tratado de arreglar los daños provocados por el tifón que azotó Hong Kong el pasado mes de julio recurriendo a tejidos de calidad inferior y no resistentes al fuego, lo que habría permitido reducir su coste a la mitad.