Elon Musk le enseña su cohete a Donald Trump
Desde que ganó las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, Donald Trump no sale de su mansión de Mar-a-Lago en Florida sin Elon Musk. El hombre más rico del mundo acompañó el presidente electo a Washington el pasado miércoles para una reunión con congresistas previa a la visita de Trump a la Casa Blanca. El plan del fin de semana fue irse en avión privado comiendo comida de McDonald’s a ver un combate de lucha libre en Nueva York. Y este martes, Trump acudió a presenciar el lanzamiento de un cohete de SpaceX en Brownsville (Texas) por invitación del magnate.
Musk hizo de guía del presidente por las instalaciones de la compañía espacial antes del sexto lanzamiento de prueba de la Starship, la nave de SpaceX, propulsada con el cohete Super Heavy.
Tras subir a su avión en Florida camino del lugar del lanzamiento, Trump se deshizo en elogios sobre Musk: “Me dirijo al Gran Estado de Texas para ver el lanzamiento del mayor objeto jamás elevado, no solo al Espacio, sino simplemente levantándose del suelo. ¡Buena suerte a Elon Musk y a los Grandes Patriotas involucrados en este increíble proyecto!”, escribió en Truth, su red social.