
El PSOE cede a la presión interna y abre expediente informativo a Leire Díez
«Queremos dejar claro -subraya en un comunicado la dirección del partido- que en el PSOE todos los afiliados tienen deberes, pero también derechos». Claramente a la defensiva, además, carga contra los medios que han atribuido la condición de «fontanera de Ferraz» o a Diez (a la que no llega a citar por su nombre y se refiere como «militante de base») y advierte de que está realizando ya un «análisis técnico» para cuantificar económicamente el «daño reputacional causado» e incorporarlo a una eventual demanda judicial.
Pese a lo tímido del movimiento, el paso dado supone un cambio de posición y evidencia un claro intento de crear un cortafuegos frente a un incendio que estaba creciendo de manera rápida. En privado, ya algunas voces de peso en el núcleo del Gobierno venían marcando distancias respecto a las actuaciones de Díez y refiriéndose a ella como «una 'pequeño Nicolás' más» o una «fantasma».
Este martes, después de que el exlehendakari Patxi López, portavoz parlamentario, tildara de «absolutamente rechazable» el comportamiento recogido en los audios publicado , la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, aseguró estar «muy disgustada».